Bicicletas solidarias

El pasado miércoles recibimos a los hermanos Andoni y Juan Mari Mujika. Tras haber viajado durante muchos años, decidieron ofrecer sus conocimientos sobre bicicletas a otros. ¿Cómo? Sacando las bicicletas de los vertederos, arreglándolas y mandándolas a África.

Hace aproximadamente siete años, tras recorrer miles de kilómetros alrededor del mundo sobre sus bicicletas, y tras ver la enorme cantidad de bicicletas que eran desechadas en nuestro entorno, decidieron abrir un pequeño taller en Billabona en el que ejercerían su tarea. Para nosotros, habitualmente, una bicicleta no es más que un instrumento de entretenimiento, pero en muchos lugares puede suponer un salto cualitativo para poder acceder a la educación o ir al trabajo. Este buen hacer no está exento de gastos, y no reciben ningún apoyo económico. Aun así, son incontables las horas que pasan reparando bicicletas. Y es que, según ellos, no hay mejor premio o reconocimiento que ser de utilidad al prójimo.

No tienen pensado de momento parar esta producción y exportación. Es más, están abiertos a que cualquiera que estuviera interesado, aprendiera y trabajara con ellos. ¿Estaríamos dispuestos a ofrecer una parte de nuestra vida a otros a cambio de nada?